Prestigio prestado

Dice el Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, en su primera acepción, que el prestigio es la “pública estima de alguien o de algo, fruto de su mérito”. Salto la segunda acepción por irrelevante para mis fines. En su tercera acepción, define el prestigio como “fascinación que se atribuye a la magia o es causada por medio de un sortilegio” . Y en la cuarta acepción, establece que el prestigio es “engaño, ilusión o apariencia con los que prestigiadores emboban y embaucan al pueblo”. Tiene varios sinónimos. Su antónimo es el descrédito. Pensando en esta fiebre universal de tomarnos – y publicar - fotos con personas que consideramos importantes, sea en el área política, económica, social, artística o de cualquier orden, con el único propósito de exhibir cercanía con ellos, tengo que recordar a mi fallecido amigo Fifo Brugal y sus mordaces burlas a quienes, según su criterio, vivían del prestigio prestado. Una buena parte de la costumbre de tomarnos fotos con relaciona...