A los jóvenes que intentan embaucar viejas por las redes

Busquen oficio. Si no saben hacer nada, aprendan. Y si no quieren, traten de matar el tiempo con otra cosa. Dejen de estar publicando sus fotos mostrando lo que creen que nos impresionaría.

Miren el que acaba de solicitarme amistad, con una nota que dice: "Natural". Si ese muchacho supiera... 

Así mismo me escriben por el Messenger a cada rato.

Muchachos, mucho antes de que ustedes nacieran, habíamos visto mucho más y muchísimo mejor que lo que ustedes exhiben semi-desnudos. Estoy segura de que completamente desnudos tampoco superan lo que nos tocó. Ay, si les contamos, morirían de vergüenza y también de envidia.

No sé del resto de mis contemporáneas, pero yo, ni muerta, perdería ni un segundo de lo que me queda de vida, mucho menos un solo centavo, en un cabeza hueca que se cree en capacidad mental para enredar a una mujer de cierta edad. Que de otras capacidades, mejor ni hablemos.

Recuerden que cuando ustedes nacieron, ya éramos adultas. Y si, en esta etapa casi final de la vida, estamos "solas" (sin un hombre al lado), deberían saber que fue una decisión tomada. Incluso las viudas, lloren o no por sus difuntos maridos.

Es mucha pequeñez pensar que a estas alturas del campeonato, ninguna mujer que medianamente se respete, va a dar espacio en su vida a un "culo cagao", tan poca cosa que solo aspira a alquilar su bimbín.

Son tan brutos que creen que no sabemos de hombres, que no sabemos de sexo, que estamos desesperadas, tanto, que podríamos fácilmente caer en sus voraces garras.

Noooo, muchachones. Pueden llevarse grandes sorpresas. Ustedes pueden resultar insuficientes, insatisfactorios, carecer de destrezas, de pericias, de atractivos, y todo eso es sin abrir la boca, que, si hablan...

Métanse en la cabeza que ustedes no valen el precio al que aspiran, ni en dinero, ni en espacio, ni en tiempo.

El día que se escriba sobre la prostitución masculina, faltarán dedos para teclear. Hasta el espacio virtual, que se tiene por infinito, resultará pequeño. En mis tiempos, los llamaban "cueros machos". Y no eran ni sombra de estos aspirantes a chulos de ahora.

M'hijo, para dar un braguetazo, hay que tener muy buena bragueta. Y mucho más imaginación. Pero, nadie sabe si encuentras lo que andas buscando. Eso sí, vas a necesitar mucha suerte. Si supieras leer bien y entendieras mínimamente lo que lees, marcarías menos números equivocados. Si leyeras las publicaciones de tantas de nosotras, sabrías mejor hacia donde apuntar.

"Qué pena me da tu caso, lo tuyo es mental". Óyelo ahí, a ritmo de salsa:

Celia y Johnny Lo Tuyo Es Mental

P.S. Lo triste de las redes es que a ésos pichones de chapeadores no los censuran ni les cierran las cuentas. He denunciado a algunos, y ahí siguen.