Apreciado Andrés (Bautista):
Solo para saber: ¿Es un show, un relajo, la alharaca por la compra de 3,215 chacabanas a $5,722.20 cada una, para un único evento? Es decir, entiendo que $18,396,870 en una compra del Estado y, sobre todo, cuando los funcionarios de primer rango se han acostumbrado a manejar montos alucinantes sin eructar, viene quedando como que tú o yo gastemos $100 en un colmado.
También entiendo que cualquier prenda de vestir de cierta calidad pueda costar eso y más.
La parte que no entiendo es para quiénes y para qué son las 3,215 chacabanas. Es decir, nunca he oído que se proporcione vestimenta a los participantes en esas actividades, sea cual sea su rol. ¿De cuántas personas estamos hablando? ¿Cuántas chacabanas les darán a cada uno? ¿Las vestirán también después del evento?
No sé, pero me parece más correcto, sobre todo de parte de Andrés Bautista, a quien muchos tenemos por un hombre de buenos modales, que aclare tranquilamente, con naturalidad, los detalles de esa compra, en vez de tildar de show y relajo las inquietudes de algunos y hasta los comentarios malsanos de otros, en estricto apego al compromiso de garantía de transparencia que hicimos para ganar las elecciones.
Esa es la mejor forma de taparles la boca. Ya tuvimos una cuota excesiva de funcionarios arrogantes y petulantes. Y, hasta el día de hoy, no se le conocían esas "virtudes" a Andrés. Siempre ha presentado una imagen de comedido, respetuoso, bien portado.
Recordemos que todavía tenemos muchísimos niños que andan desnudos y descalzos. Para ellos nunca ha habido piedad ni misericordia. Inexplicablemente, seguimos viendo la pobreza extrema con naturalidad.
Y por otro lado, somos muchos los que queremos y necesitamos que el gobierno, que con tanto esfuerzo impulsamos, quede bien. Somos nosotros quienes cogemos la pela de las críticas, las burlas, los reproches, las quejas y demás. No siempre tenemos argumentos para defenderlas ni aclararlas.
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